Buscar ayuda para tu salud mental puede ser un desafío, pero es el primer paso hacia la mejora. Nuestra orientación te ayudará a identificar a la persona adecuada a la que recurrir y cómo buscar su apoyo.
Comprender cuándo necesitas ayuda y saber cómo pedirla son pasos cruciales para controlar tu salud mental. Ya sea que estés lidiando con estrés, ansiedad o simplemente te sientas abrumado, buscar ayuda es una decisión valiente y positiva. Esta guía te ayudará a explorar las distintas opciones disponibles para los jóvenes que buscan asistencia en materia de salud mental.
Cómo identificar cuándo necesita ayuda: Reconocer las señales de que podrías necesitar ayuda es el primer paso. Es posible que te sientas constantemente triste, ansioso o desconectado, o tal vez tengas problemas para dormir, tener apetito o concentrarte. Estos son solo algunos indicadores de que hablar con alguien podría ser beneficioso.
Otros indicadores:
- Cambios de humor: Experimentar cambios repentinos e intensos en su estado de ánimo, como irritabilidad o ira.
- Retraimiento social: Evitar amigos, familiares y actividades que antes disfrutabas.
- Fatiga: Sentirse constantemente cansado o sin energía para completar las tareas diarias.
- Síntomas físicos: Experimentar dolores y molestias inexplicables, dolores de cabeza o problemas estomacales.
- Pensamiento negativo: Sentirse persistentemente desesperanzado, inservible o con culpa excesiva.
- Abuso de sustancias: Recurrir al alcohol o las drogas para hacer frente a las emociones o el estrés.
- Autolesión: Participar en conductas que causan daño físico a uno mismo.
- Cambios en el comportamiento: Notar cambios significativos en los hábitos de alimentación, sueño o higiene.
Reconocer cualquiera de estos signos significa que buscar ayuda podría ser valioso.
Hablar con alguien de confianza: Hablar abiertamente de tus sentimientos puede ser abrumador, pero compartir tus pensamientos con alguien de confianza puede ser un gran alivio. Puede ser un amigo, un familiar, un maestro o un consejero escolar. Pueden brindarte consuelo y ayudarte a dar los siguientes pasos para obtener apoyo profesional.
A quién dirigirse
Tu red de apoyo es única y tú eres el mejor juez para decidir en quién te sientes cómodo confiando. Sin embargo, cuando decides buscar apoyo, hay muchas personas disponibles para ayudarte. Aquí tienes una lista de personas a las que puedes recurrir:
- Amigos: Puede comprender su vida diaria y ofrecerle apoyo cercano.
- Hablar con un amigo o familiar puede marcar una diferencia importante, aunque no siempre es sencillo. Si desea obtener consejos sobre cómo abrirse a sus seres queridos, siga este enlace a nuestro artículo: Hablar con amigos y familiares sobre la salud mentalSi sus relaciones con amigos contribuyen a su angustia, consulte nuestras guías: Guía para los problemas con los amigos para obtener información útil.
- Miembro de la familia: Si sus relaciones con su familia contribuyen a su angustia, consulte nuestras guías: Guía para problemas familiares para obtener información útil.
- Maestro: Los profesores observan tu comportamiento y desempeño en un entorno estructurado. También pueden ponerte en contacto con recursos de orientación escolar si te sientes cómodo con ello.
- Consejero escolar: Están capacitados para ayudar con los desafíos académicos y personales y están allí para escucharlo. Tenga en cuenta que los maestros, los consejeros escolares y cualquier otro personal escolar están denunciantes obligatorios. Es decir, la ley les exige que denuncien cualquier caso de abuso o negligencia infantil. Puede hablar con los trabajadores de la escuela en un entorno confidencial; sin embargo, ellos están obligados a protegerlo de cualquier daño.
Ayuda profesional:
- Consejeros escolares y centros de bienestar universitario: La mayoría de las escuelas y universidades ofrecen acceso a consejeros que se especializan en ayudar a los estudiantes. Estos servicios suelen ser gratuitos y confidenciales.
- Médicos de atención primaria: Su médico de cabecera es un buen punto de partida para buscar ayuda. Puede brindarle asesoramiento inicial, evaluar si tiene problemas de salud más graves y derivarlo a un especialista en salud mental si es necesario.
- Profesionales de la salud mental: Los psicólogos, psiquiatras y terapeutas autorizados pueden ofrecer atención más especializada a través de terapia y, si es necesario, medicación.
Obstáculos para buscar ayuda:
Varios factores pueden impedirle buscar ayuda, incluidas inquietudes sobre:
- Cómo los demás podrían percibirte.
- Si sus problemas son importantes o serán tomados en serio.
- Añadiendo presión extra a los servicios de salud mental.
- El soporte no está disponible, es difícil acceder a él o no es adecuado para sus necesidades.
- Las cosas empeoran después de buscar ayuda, como preocupar a su familia.
- Cómo abordar el tema o expresar tus inquietudes.
Es completamente normal tener estas inquietudes, pero no permitas que te impidan pedir ayuda. Tus emociones son válidas y buscar ayuda no es una carga para nadie. Siempre está bien pedir ayuda.
Recursos en línea y líneas de ayuda: Numerosas plataformas en línea ofrecen recursos de salud mental específicamente para jóvenes. Sitios web como MentalH2O.org ofrecen artículos, infografías y enlaces directos a servicios de salud mental. Además, hay líneas de ayuda como la Línea Nacional de Prevención del Suicidio (1-800-273-TALK) disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana para brindar asistencia inmediata.
Dando el primer paso: Decidir buscar ayuda es un primer paso importante hacia la recuperación. Recuerde que la salud mental es tan importante como la salud física y que usted merece apoyo.
Pedir ayuda es una señal de fortaleza, no de debilidad. Al explorar estas vías, toma el control de su bienestar y allana el camino hacia una vida más saludable y feliz. Si alguna vez se siente abrumado por el proceso, recuerde que hay recursos como Mental H2O para apoyarlo y guiarlo en cada paso del camino.